Vinos dulces y cómo elegirlos.

El vino, más que una bebida... 

El vino es más que sólo una bebida alcohólica , el vino es toda una cultura y la cultura del vino es una de las más espectaculares, pues tan sólo una copa  contiene tanto historia como arte y tradición milenaria. Sin embargo en México hay muchas personas a las que el vino aún no los ha cautivado por completo, pero no es tarde para enamorarte de este delicioso arte, solo tienes que darle una oportunidad a esa copa de vino ideal para ti. 

El matrimonio de tu comida

El momento de la comida es sagrado, y más para los mexicanos que tanto adoramos a nuestra gastronomía, imagínate ese momento glorioso en la mesa, rodeado de tus seres queridos, compartiendo los más felices y memorables momentos;  celebrando una ocasión especial o simplemente disfrutando de un momento juntos ¿puedes imaginarte este momento sin una bebida que este a la altura de ese mágico momento? ¿ podrías imaginarte que no exista ese brindis con  esa copa de vino? Es casi imposible. 

El vino no sólo es delicioso por sí mismo, si no también nos ayuda a disfrutar de ese platillo de una manera diferente, digamos que el vino y nuestra comida hacen un perfecto matrimonio para ofrecernos una experiencia sensorial sin igual. 

Resulta que el vino puede lograr esta magia gracias a su composición , a la cantidad adecuada de alcohol, y a sus sabores,  logrando así  despertar de alguna manera a nuestras papilas gustativas, volviéndolas mucho más sensibles a los sabores de nuestra comida y haciendo que descubramos los sabores de cada bocado. 

¡Dale el sí! 

Si piensas que el vino solo se lleva bien con platillos muy sofisticados; estas completamente equivocado, el vino lo puedes comer prácticamente con toda la comida existente en el planeta.

Y  si aún piensas que el vino es caro ¡amigo date cuenta ! pues existen muchas variedades de vino y a precios muy accesibles; solo es cuestión de saber cómo elegir el mejor, claro que hay etiquetas muy MUY costosas pero no son sinónimo de calidad o buen sabor y viceversa, un vino barato no es señal de un vino "malo". Así que ¡Ojo! que a continuación  te dejamos unos TIPS buenísimos  para saber  cómo elegir un vino dulce; si es que no te gustan los vinos robustos o muy "fuertes" y sobre todo para que comiences a profundizar más en materia de vinos. 

• Elige variedades de uva como: Cabernet, Tempranillo, Merlot o Shiraz. 

• Elige vinos afrutados, por lo general las etiquetas indican si son afrutados o especiados. 

• Un vino blanco suele ser más frutal y dulce. 

• Para vinos blancos las uvas  ideales  son Moscatel y Riesling que son las más comunes para vinos blancos. 

• Los vinos jóvenes son los ideales para ti si no estás acostumbrado a sabores muy pronunciados.

• El famoso Lambrusco es una buena opción de vino muy dulce aunque es una variación llamada Frizzante. 

Deja a un lado el clericot y atrévete a ese vino que espera por ti y aventurate a vivir una experiencia de sabor que no te vas a arrepentir.